Regla general:
más grande es mejor

Las pantallas vienen en varios tamaños, pero recomendamos seleccionar el tamaño más grande que te permita tu presupuesto. Si estás pensando en obtener una pantallas de 75 pulgadas o más, hay algo que debes saber. De acuerdo con la investigación interna de Samsung, un motivo importante para comprar pantallas nuevas es la demanda de pantallas más grandes. E incluso después de la compra, la satisfacción se mantiene muy alta. Considerando lo anterior, ¿tienes en mente algún tamaño de pantalla específico? Ahora es el momento de pensar en grande.

Distancia de visualización recomendada para la pantalla

Todas las pantallas tienen una distancia y ángulo recomendados que debes considerar al configurarlos en tu hogar. La mejor y más inmersiva experiencia visual es cuando la pantalla ocupa 40 grados de tu campo de visión. La distancia de este campo de visión se puede calcular simplemente conociendo el tamaño de tu pantalla. Para obtener esta distancia adecuada, multiplica el tamaño de la pantalla por 1.2. Entonces, para una pantalla de 75 pulgadas, eso significa sentarse a 90 pulgadas o 2.3 metros de distancia. Puedes consultar la tabla que se incluye para determinar las distancias de visualización recomendadas para varios tamaños de pantalla; de esta manera, podrás elegir e tamaño ideal para tu espacio.

1. Verifica las dimensiones reales de la pantalla.

La emoción de comprar una pantalla nueva puede hacer que nos olvidemos de la tarea de instalarla. Una pantalla implica mucho más que su tamaño. Las dimensiones físicas de una pantalla grande, soporte y bisel incluidos, así como su futura ubicación en la habitación, son factores importantes que hay que tener en cuenta. Asegúrate de comparar las dimensiones exactas de la pantalla con las de tus muebles para evitar complicaciones a la hora de instalarla.

2. Verifica la resolución de la pantalla, especialmente con una pantalla grande.

La regla general es que, a medida que aumenta el tamaño de la pantalla, también debería hacerlo el número total de pixeles o la resolución. Cuanto mejor sea la resolución, mejor se verá la imagen en lugar de los pixeles. Por eso, al comprar un televisor de pantalla grande, es muy recomendable optar por una calidad de imagen de alta resolución, como 4K.

Simplemente recuerda que comprar pantallas grandes significa no arrepentirse más adelante.